Debido a la propagación del SARS-COV-2 y las medidas de aislamiento obligatorio, se puede asumir que tanto los flujos migratorios mixtos como el acceso de internet de esta población cambió. Un aspecto importante es el cierre de la frontera colombo-venezolana en marzo, lo cual ha obstaculizado el flujo migratorio binacional. Sin embargo, existe un canal humanitario 7 a través del cual han retornado cerca de 100.000 venezolanos desde abril a la fecha, así mismo existe un flujo irregular a través de los pasos informales en la frontera (trochas y ríos).


En consecuencia, existe incertidumbre sobre el saldo migratorio real durante el cierre fronterizo y la posibilidad de que este sea potencialmente detectado a través de las conexiones a Facebook.